Gafas reticulares irisana pasta

Principios:
Con las gafas Reticulares Irisana se ve a través de pequeños orificios que tienen el efecto de reducir los rayos divergentes (los que producen el desenfoque porque inciden en los laterales de la retina) dejando pasar sólo los rayos de luz que inciden perpendicularmente en la parte central de la misma, zona de mayor agudeza visual (fóvea), de esta forma se reduce la dispersión de la luz y la visión es más nítida.
Al haber muchos orificios, obligan a mover los ojos para ver cada vez por uno, según lo que se quiera observar en cada momento, ayudando al ojo a usar todos los músculos. A medida que se usan las gafas, el material opaco que se encuentra entre los agujeros, al estar tan cerca del ojo, quedará fuera del foco y el cerebro, después de un cierto tiempo, tiende a ignorarlo.
Beneficios de las Gafas Reticulares Irisana
1. Fomenta los buenos hábitos de visión
2. Aptas para miopía, presbicia, hipermetropía, etc.
3. Ayudan a ver con claridad tanto de lejos como de cerca
4. Relajan la tensión causada por las lentes, ordenadores, TV, etc.
5. Válidas tanto para adultos como para niños.
Contraindicaciones:
No son adecuadas para:
– Leer en condiciones de luz escasa
-Conducir o usar máquinas para las que haya que prestar atención
-Actividades que requieran movimientos rápidos (deportes….)
-El uso en personas que tengan más de 6 dioptrías de graduación no está contraindicado aunque no van a notar mejoría en la visión al usarlas porque no pueden eliminar la borrosidad de la imagen.
Proceso de adaptación:
ADAPTACIÓN AL ORDENADOR. Las gafas nos obligan a mover la mirada por diferentes puntos de la pantalla por lo que el ojo trabaja y no permanece fijo en un solo punto. Se requiere una adaptación en la cual la velocidad a la que estamos acostumbrados se reduce por lo que hay que tomar el proceso con paciencia ya que en un período de aproximadamente 15 días se recupera el ritmo normal.
ADAPTACIÓN AL TELEVISOR. Si se usan gafas graduadas es necesario quitarlas y poner las reticulares que al principio obligan a pasear la mirada por la pantalla para poder definir las escenas. Esto es bueno porque evita la fijación y obliga a ejercitar los músculos. Ponerlas cada día un rato hasta conseguir utilizarlas una hora.
ADAPTACIÓN A LA LECTURA. Semejante a lo que ocurre con el ordenador pero para leer es necesario tener una buena fuente de luz.